Es un curso teórico con metodología práctica, en el cual se analiza y reflexiona sobre el Perú como un país caracterizado por la heterogeneidad cultural y definido por una historia de exclusión, discriminación y violencia en el marco de la realidad de América Latina. Estas variables han generado diferentes subjetividades y han desarrollado un malestar personal y social que repercute en el bienestar de las personas y comunidades.