El curso incorpora una visión del desarrollo de carácter sistémico, con incorporación de cuatro niveles de análisis (micro, meso, meta y macro), a fin de presentar los elementos básicos de una estrategia de gestión del desarrollo territorial, superando la tradicional visión aislada de la empresa o el concepto de competitividad como simple pugna o rivalidad, que excluye la cooperación entre los diferentes actores así como la dotación de los bienes de carácter colectivo y el contexto institucional, cultural, histórico y social.
De este modo, se insiste en la complementariedad de los entornos sectorial y territorial de las actividades productivas, resaltando los componentes de la organización territorial de dichas actividades, para lo cual se precisa la participación efectiva de los distintos actores clave, esto es, el sector público, el sector privado empresarial, el sector de conocimiento, y la sociedad civil organizada territorialmente.
Para impulsar el desarrollo territorial con generación de empleo e ingreso, es imperativo un diseño mixto de políticas en el cual, junto a las medidas de carácter genérico deben impulsarse también políticas específicas de carácter territorial en los ámbitos del desarrollo productivo, el empleo local, la inclusión social y la sustentabilidad medioambiental.
El curso expone el rol de las autoridades locales como agentes importantes en los procesos de desarrollo territorial ya que muchas veces son los líderes principales de dichas iniciativas de desarrollo al impulsar en los territorios la movilización y concertación de actores clave para el desarrollo económico y la creación de empleo a nivel local. En este contexto, el enfoque del desarrollo territorial precisa ser construido a partir de las instituciones sociales existentes, tratando de fortalecerlas y facilitar la articulación de los actores territoriales en torno a las estrategias de desarrollo consensuadas entre los actores clave territoriales.
La modernización de la gestión pública de las administraciones locales debe incorporar también la capacitación en su nuevo papel como animadoras y promotoras del desarrollo territorial, a fin de construir conjuntamente con los actores privados, el sector científico y académico, y la sociedad civil organizada localmente, los necesarios entornos territoriales innovadores para el fomento productivo sustentable y la generación de empleo digno. Sólo así, las municipalidades podrán colaborar en la generación de riqueza y el empleo productivo, superando la tradicional actuación asistencial. El curso alude, igualmente, al marco normativo y los instrumentos de gestión y herramientas para el desarrollo territorial como son las Agencias de Desarrollo Local o las Agencias Territoriales de Empleo.